En Ituzaingó se contabilizan 500 obreros despedidos lo que provocó un impacto directo en la economía local. Mientras que la industria forestal se encuentra en crisis debido a las medidas económicas impulsadas por Javier Milei, que generaron un enfriamiento de la economía y baja competitividad a nivel internacional.
Las medidas económicas impuestas por el Gobierno Nacional comenzaron a generar preocupación en los diferentes sectores de trabajo en la provincia de Corrientes. En Ituzaingó fueron despedidos 500 obreros, generando un impacto directo en la economía local. Mientras que la industria forestal se declaró en crisis por el enfriamiento de la economía y la falta de competitividad a nivel internacional.
En los últimos días se conoció que fueron despedidos 50 trabajadores que desarrollaban tareas en la obra del promocionado Parque Industrial de Ituzaingó, que se suman a los 450 obreros de la maquinización del brazo Añá Cuá en Yacyretá. Estos números representan familias enteras con disminución de ingresos y una generación de problemas en la economía local, provocando una reducción del consumo, la caída en la recaudación y la disminución en la demanda de materiales de construcción.
El impacto sobre la economía ituzaingueña ya se nota y asi lo reflejan comerciantes locales que ven afectadas sus ventas.
Por otra parte, en el noreste provincial el sector foresto industrial se declaró en situación crítica, generada por el enfriamiento de la economía y la disminución de la inversión en obra pública. La falta de competitividad del producto nacional en el mercado internacional es otro golpe duro, causado por la inflación galopante y los altos costos de producción.
Los aumentos en la estructura de costos, como los combustibles y la energía, han hecho que sea más difícil para las empresas mantenerse a flote y competir en el mercado global. Solicitan que se tomen medidas urgentes para apoyar a los trabajadores afectados y revitalizar los sectores clave de la economía.
El presidente de la Asociación de Industriales Madereros y Afines de Santo Tomé, Raúl Falero, admitió que el sector está en una “situación muy complicada” desde diciembre de 2023 debido a la baja demanda del mercado interno.
Además agregó “la baja demanda del mercado nacional, por todos sabido, se debe al enfriamiento de la economía, de la obra pública, y de todo lo que está relacionado con la construcción, lo que hace que automáticamente baje la demanda de madera, lo que repercute en nuestra actividad”. (NC&A)
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